lunes, 11 de agosto de 2014

Cada malagueño gasta 110 euros menos en comida desde que comenzó la crisis

Según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en la comunidad se ha reducido el gasto per cápita en alimentación un 7% en los últimos cinco años

Andalucía puso freno al consumo, que quedó en 626 kilos de alimentos por persona en 2013 Los malagueños apuestan por adquirir productos más baratos como salchichas, pollo, bollería y platos preparados
La recuperación económica parece que aún no ha llegado al consumo. La compra de alimentos sigue descendiendo en Andalucía. Según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, cada andaluz ha recortado su gasto en 110 euros desde que comenzó la crisis, lo que supone una rebaja del 7% con respecto a 2008, el año que empezaron a notarse los primeros síntomas.
El frenazo en la adquisición de productos alimenticios se detalla en la información que queda reflejada en la base de datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente sobre consumo en hogares, que contiene una estadística de la evolución en la compra de alimentos de las familias españolas. En 2008 cada andaluz consumió 667,92 kilos mensuales de alimentos mientras que el año pasado el consumo se quedó en los 626,27. Esto supone un descenso del 6%. La base de datos no diferencia entre turistas y residentes, por lo que el consumo de los 21 millones de visitantes que suele recibir la comunidad está incluido en la prospección del ministerio.


La tendencia parece seguir el ritmo contrario en el resto de España. El consumo se elevó un 2,4% con 676 kilos de ingesta per cápita. Los hogares españoles también incrementaron su gasto, unos 1524 euros, lo que supone una subida del 3,8%. Estos números rompen la inclinación de años anteriores en el que el descenso de la compra de alimentos era la tónica general.
Entre los productos más destacados se encuentra la bajada en el consumo de carne, que descendió un 8%. El pescado acusó un descenso más pronunciado, un 13%, así como los licores, siendo el más perjudicado el vino, del que se vendieron cinco millones de litros menos. Por el contrario, aumentaron las ventas de frutas y verduras, un 8%, aunque no fue acompañado con una subida del gasto. Los productos que sí se incrementaron fueron la bollería y pasteles, cuyo consumo subió un 10%, y los platos preparados, con un aumento de un 5%.
En el caso de los hogares andaluces ha pasado a mejor vida llenar la nevera con grades cantidades de alimentos. Las compras se vuelven más selectivas. Un dato revelador es que hace cinco años cada andaluz destinaba una media anual de 1407 euros en productos alimenticios. En 2013 descendió hasta situarse en 1297 euros. En el último lustro los habitantes de la comunidad han dejado de gastar 110 euros por persona al año en comida.
Menor gasto en carne
El consumo de carne se ha mantenido desde 2008, aunque el gasto ha caído un 8%. Los andaluces han pasado de gastar 293 euros al mes a 267, lo que supone una rebaja de 26 euros. La variedad más perjudicada ha sido la carne fresca. De un gasto de 180 euros cuando comenzó la crisis se ha pasado a 165 euros.
Los habitantes de la comunidad han apostado por productos más baratos como la carne de pollo, el conejo y las salchichas. Las ventas de carne de pollo aumentaron en 12 millones de kilos. Sin embargo, el gasto se redujo en 2 euros aunque el consumo se mantuvo estable, situándose en los 14 kilos por persona. Por su parte, las ventas de carne de conejo se doblaron al igual que el gasto, que se multiplicó por dos. Las salchichas se consolidan como uno de los productos cárnicos que más aumentan con unas ventas de 4 millones de kilos más.
Las carnes más caras pierden adeptos. El gasto en carne de cerdo acusa un descenso del 20%. Los andaluces gastaban unos 67 euros en 2008 mientras que el año pasado solo desembolsaron 53. Además, las ventas registraron una disminución de seis millones de kilos. Otros dos millones de ternera se han dejado de vender desde que comenzó la crisis y el gasto también se ha reducido en cuatro euros. Mientras que el cordero ha disminuido en un millón y el gasto, en 2 euros.
Pierde el pescado fresco
El pescado fresco es el más perjudicado por la crisis económica. Desde 2008 a 2013 se han dejado de vender unos nueve millones de kilos de estos productos. El gasto también ha descendido en 11 euros, pasando de 74 euros por persona en 2008 a 63 el pasado año. Y es que el gasto de cada andaluz disminuyó en 25 euros, lo que se traduce en un 13% menos. A pesar de esta disminución, los habitantes de la comunidad no se lanzaron a comprar pescado congelado. Sus ventas también se redujeron en tres millones de kilos, al igual que el gasto en cuatro euros.
Los ciudadanos sí que apostaron por pescados más baratos como el bacalao. Sus ventas han pasado de cuatro millones de kilos anuales a casi siete, incrementándose también el gasto. Llama la atención que igualmente haya aumentado el consumo de salmón. Cada andaluz gasta tres euros más en este tipo de pescado, cuyo precio es más caro, desde 2008.
El marisco ha sido el que se ha llevado la peor parte de los efectos de la crisis. Su consumo ha disminuido en 12 millones de kilos, lo que se traduce en un descenso del 20%, mientras que el gasto también ha caído en 13 euros.
Con la crisis se consume menos vino. Las ventas de esta bebida tradicional española descendieron en cinco millones de litros. Los andaluces han reducido en dos euros su gasto. Lo que sí ha aumentado es la cerveza. Unos 12 millones de litros de incremento exactamente. Aunque paradójicamente el gasto ha disminuido en tres euros.
Las frutas y verduras son los únicos productos cuyas ventas han aumentado de forma considerable, en concreto un 8%. Unos 51 millones de kilos más de fruta fueron consumidos, aunque el gasto descendió en cinco euros por persona. La razón puede estar en la racionalización a la hora de comprar los productos. Las frutas y hortalizas transformadas también incrementaron sus ventas en cinco millones de kilos. Tampoco sucedió lo mismo con el gasto, que ha caído dos euros.
Ante la crisis los ciudadanos optan por consumir bollería industrial y platos preparados. El primer grupo experimentó un aumento de las ventas de nueve millones de kilos más, con una subida que representa un 10%. No le ocurrió lo mismo al gasto, que bajó dos euros por persona. Un caso similar es el de los platos preparados. Su compra también se incrementó un 5%, pasando de 88 millones de unidades vendidas en 2008 a 93 el pasado año.

http://www.laopiniondemalaga.es/malaga/2014/08/10/malagueno-gasta-110-euros-comida/699168.html

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