El 32% de los hoteles cesará su actividad hasta marzo, de ellos casila mitad lo hará por primera vez ante el impacto de la crisis
La situación de la economía mundial obliga a más hoteles que nunca a echar el cierre en la Costa hasta el próximo mes de marzo. Los expertos aseguran que hay que remontarse a la crisis de principios de la década de los 90, donde el destino sí se sumió en una crisis turística, para igualar la actual situación de cierres temporales de hoteles.
En los datos coinciden tanto la patronal como los sindicatos: en torno al 35% de los establecimientos turísticos dejarán de estar operativos en este mes y no volverán a recibir clientes hasta marzo. De este dato cabe destacar que casi la mitad de ellos son hoteles que hasta ahora nunca se habían planteado cerrar en temporada baja. El presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos), José Carlos Escribano, se mostró contundente a la hora de justificar este nuevo escenario: «Hay veces que se habla de la crisis como si no existiera. No estamos ante un invierno malo de hace tres años. Nos encontramos en un contexto mundial en el que los principales mercados emisores de viajeros extranjeros, de los que depende la Costa en temporada baja, están en plena recesión. Las circunstancias exteriores son tan extremas que las medidas tienen que ser igual de extremas».
En los datos coinciden tanto la patronal como los sindicatos: en torno al 35% de los establecimientos turísticos dejarán de estar operativos en este mes y no volverán a recibir clientes hasta marzo. De este dato cabe destacar que casi la mitad de ellos son hoteles que hasta ahora nunca se habían planteado cerrar en temporada baja. El presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos), José Carlos Escribano, se mostró contundente a la hora de justificar este nuevo escenario: «Hay veces que se habla de la crisis como si no existiera. No estamos ante un invierno malo de hace tres años. Nos encontramos en un contexto mundial en el que los principales mercados emisores de viajeros extranjeros, de los que depende la Costa en temporada baja, están en plena recesión. Las circunstancias exteriores son tan extremas que las medidas tienen que ser igual de extremas».
El panorama que presentará hasta marzo la Costa supone que habitualmente en invierno cierran un 20% de hoteles, unos porque en su estrategia de gestión no entra dar un servicio todo el año, y otros porque aprovechan los meses más flojos de actividad para realizar reformas. En esta ocasión, la cifra de negocios que dejarán de recibir turistas ha crecido más de 12 puntos, un incremento que tendrá un efecto dominó en la oferta complementaria: restaurantes y centros de ocio.
Acuerdos
Al margen de esta estadística, hay pequeños hoteles que están llegando a acuerdos con sus trabajadores para unir vacaciones y días festivos del año para cerrar los meses más flojos del año. Escribano explicó que lo importante de esta medida, que indudablemente acentuará la estacionalidad, es que los empleados mantienen sus ingresos y no pierden prestaciones sociales. «Los cierres por temporada no tienen un coste laboral. Peor es arriesgarse a mantener el hotel operativo y sin rentabilidad, lo que sí compromete el futuro del negocio y de la plantilla», dijo.
En cualquier caso, la Costa del Sol se mantiene como uno de los destinos con mayor oferta abierta todo el año. En este sentido, desde Aehcos recuerdan que hay zonas en la que esta medida alcanza al 80% de la planta hotelera. Por eso insisten en que, pese al incremento de hoteles sin actividad, hay oferta suficiente para atender la demanda.
La Costa en invierno depende sobremanera del turismo extranjero y, en la actualidad las ventas de los touroperadores en el mercado principal, el Reino Unido, están un 25% por debajo del pasado año. Esta situación se repite en Alemania, segundo mercado emisor. Aunque la moda de decidir viajar en el último momento puede mermar esta drástica caída en reservas para invierno, hay hoteleros que creen que lo más sensato es cerrar y más después de la última temporada baja, que ha pasado factura a más de un establecimiento. «La resistencia tiene un límite», explicó un director de uno de los hoteles que echará el cierre en unas semanas.
La Costa occidental, con Marbella a la cabeza, es la más castigada. La oferta de alta gama, cuatro y cinco estrellas, los que conforman el grueso de negocios que retomarán la actividad en marzo. «Es una situación coyuntural por la recesión mundial. El turismo en esta ocasión no está en crisis, por lo que no debe cundir la alarma. Es una alternativa para garantizar el futuro de la Costa, curtida en periodos como éste», dijo.
Esta decisión dejará en sus casas a 1.800 trabajadores afectados este invierno por estas regulaciones temporales, según el responsable de Turismo de CC. OO. Andalucía, Gonzalo Fuentes.
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