Los trabajadores se trasladaron a la casa del dueño de la empresa para exigirle una reunión urgenteMARÍA ROSALES Láctea Antequerana confirma a los trabajadores el cese definitivo de la actividad y el cierre de la empresa. El pasado 13 de enero los empleados de la marca antequerana se personaron a las puertas de la vivienda del gerente de la empresa en Málaga, Martín Criado, tras varios intentos frustrados de reunión. Finalmente, se produjo el encuentro con la confirmación, por parte de Criado, de la extinción de la marca. Así, el presidente del Comité de Empresa Láctea La Vega, José Ramón Castillo, señaló que «firmaron la documentación correspondiente para el cese de la actividad y fijaron los pagos de indemnización en 28 días por año trabajado y los atrasos de las nóminas de noviembre, diciembre y los días de enero que aún les adeuda la empresa».
Ahora será la marca antequerana la que tendrá que presentar la documentación en la delegación de Empleo de la Junta de Andalucía que dictaminará si procede o no el segundo ERE. Una vez hecha la resolución la empresa deberá pagar a los trabajadores el dinero que aún les adeuda.
En la empresa trabajaban casi un centenar de personas. En el primer ERE salieron 46 trabajadores que tuvieron que denunciar por la vía judicial el presunto incumplimiento de las condiciones por parte de la dirección de la empresa. Ahora, el segundo ERE afecta a 43 empleados. El abogado de los trabajadores y director del despacho Derelex Asociados, Rafael Córcoles, explicó a los medios de comunicación que «se trata de un Expediente de Regulación de Empleo por causas económicas, por motivo de cese de actividad» de Láctea Antequerana, que fabrica, comercializa y distribuye productos lácteos bajo la firma La Vega y para marcas blancas. La empresa llevaba desde el pasado mes de agosto con la producción paralizada.
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